PRÍAPO PRÍAPO PRÍAPO PRÍAPO PRÍAPO En la Mitología griega es una deidad rústica de la fertilidad, tanto de la vegetación como de los animales relacionados con la vida agrícola. Adorado como protector de los rebaños de ovejas y cabras, del vino, de las abejas, de los productos de las huertas y de la pesca. Príapo aparece representado con un enorme falo en
perpetua erección o en posición fálica, símbolo de la fuerza fecundadora de la naturaleza. Alejaba el mal de ojo y su estatua protegía los huertos de los ladrones. Según algunas fuentes se afirma que había
nacido de los amores entre Afrodita y Zeus, otros afirman que fue hijo de Dionisios. Príapo dicen que fue condenado a tener su falo siempre en erección a causa de los celos de Era, esposa de Zeus. Símbolo del instinto sexual,
perpetua erección o en posición fálica, símbolo de la fuerza fecundadora de la naturaleza. Alejaba el mal de ojo y su estatua protegía los huertos de los ladrones. Según algunas fuentes se afirma que había
nacido de los amores entre Afrodita y Zeus, otros afirman que fue hijo de Dionisios. Príapo dicen que fue condenado a tener su falo siempre en erección a causa de los celos de Era, esposa de Zeus. Símbolo del instinto sexual,
de la fecundidad masculina, protector de la naturaleza y guardián de las huertas y jardines. Hoy en día se denomina priapismo a la dolorosa enfermedad que provoca la permanente erección del pene.