AIRMID AIRMED AIRMID AIRMED Era una Diosa Celta de las Hierbas Medicinales. Era la Diosa curandera de los "Tuatha dé Danann"(Médica de los Dioses), Diosa de las Plantas Medicinales. Airmid era hija del Dios de la Medicina Diancecht.
Símbolo de la Curación y resurreción humana a través del conocimiento y de la naturaleza y sus elementos. Ella era una divinidad portadora de la sabiduría de las plantas para la curación. Esta diosa tenía un manantial mágico, en el que sumergía a los enfermos para devolverles la salud y devolvía a la vida a los muertos. A aquellos que estaban heridos de muerte o que habían fallecido por enfermedad, se les sumergía en el pozo, y salían milagrosamente restablecidos. Por todo esto, se dice de Airmid que conocía todos los secretos del poder curativo del
e sanación. Su hija Airmid, necesitada de información pues ella, era quién escuchaba a los enfermos que hacían largas colas en la puerta del castillo para solicitar audiencia con su padre para rogarle sanación. Con el dolor profundo en su
corazón, ante tanto sufrimiento sin respuesta, se dedicó a espiar a su padre en sus sanaciones con los Dioses y por las noches, mientras este dormía, se apoderaba de sus libros que se llevaba a leer a un manantial cercano durante la mañana, dónde nadie podía encontrarla. Es así movida por su corazón como aprendió todos los secretos de la sanación.
Símbolo de la Curación y resurreción humana a través del conocimiento y de la naturaleza y sus elementos. Ella era una divinidad portadora de la sabiduría de las plantas para la curación. Esta diosa tenía un manantial mágico, en el que sumergía a los enfermos para devolverles la salud y devolvía a la vida a los muertos. A aquellos que estaban heridos de muerte o que habían fallecido por enfermedad, se les sumergía en el pozo, y salían milagrosamente restablecidos. Por todo esto, se dice de Airmid que conocía todos los secretos del poder curativo del
agua y entendía la magia de la vibración acústica. Entre sus talentos estaba el de mezclar el elemento tierra con el elemento agua. En un castillo sagrado, vivía el Dios de la medicina Diancecht, con algunos de sus hijos todos guerreros,
otro hijo con inquietudes sanadoras y la joven Airmid. Pero este Dios había reducido sus consultas sanadoras solo a las deidades y aquellas personas que las divinidades decidían que debían ser sanadas. Miach uno de sus hijos seguía de cerca las artes de su padre, pero Diancecht le negaba las enseñanzas en el arte de lae sanación. Su hija Airmid, necesitada de información pues ella, era quién escuchaba a los enfermos que hacían largas colas en la puerta del castillo para solicitar audiencia con su padre para rogarle sanación. Con el dolor profundo en su
corazón, ante tanto sufrimiento sin respuesta, se dedicó a espiar a su padre en sus sanaciones con los Dioses y por las noches, mientras este dormía, se apoderaba de sus libros que se llevaba a leer a un manantial cercano durante la mañana, dónde nadie podía encontrarla. Es así movida por su corazón como aprendió todos los secretos de la sanación.