jueves, 16 de junio de 2016

SALVIA - DIVINORUM . " LA HIERBA DE LOS DIOSES "

         
   SKA - PASTORA        HIERBA - MARIA         La Salvia Divinorum es llamada "Ojos de la Pastora" , "Ska Pastora", "Ska María", "Hierba María" o "Hierba de los Dioses". La Salvia Divinorum es una hierba que modifica la conciencia y el discernimiento que es utilizada en viajes visionarios o en rituales curativos. Esta extraordinaria
planta ha sido utilizada desde antaño en ceremonias y rituales chamánicos. Su valor se deriva de sus efectos alucinógenos, de los que los se han servido como medio para comunicarse con los espíritus que son parte esencial de los sistemas de creencias indígenas. El principio activo de la Salvia Divinorum es llamada Salvorina-A. A diferencia de otros alucinógenos, no es un alcaloide, es decir, su molécula no contiene nitrógeno. Algunos sostienen que la identidad del psicoactivo conocido en el antiguo México como "pipiltzintzintli "( término nahuatl que significa la más noble
princesa) correspondería a la Salvia Divinorum, la hierba de los dioses conocida y usada desde la Antiguedad y hoy en día todavía usada por los Mazatecos . En el ritual chamánico de adivinación   mazateco solo se utilizan las hojas            frescas. Presente en los rituales de sanación de este Pueblo Indígena  (originarios del Estado de Oaxaca al Sur de México), ya que permitía acceder a mundos espirituales, a conectar con el reino de los espíritus, ya que ellos tienen la creencia de que controlan las enfermedades y
             la salud en el mundo material, el mundo terrenal. A veces esta divina planta, divina mensajera es utilizada por los chamanes como sustituto de los Hongos alucinógenos, que estos Pueblos usaban muy
habitualmente para trasladarse a ese otro reino  que conectan con el nuestro (los hongos no salen todo el año y la divinorum como vegetal la cultivaban), aunque hay muchos chamanes que
sólo utilizarían la Salvia Divinorum esta mágica Planta y no todos, pues sus efectos son fuertes y no todos están preparados, esto no es un juego, esto es un mundo de ancestrales creencias, al que siempre para creer hay que aprender a respetar.